Enfrentamientos entre grupos críticos con el género y grupos pro transexuales en Edimburgo
Aumentan las tensiones mientras los activistas se reúnen en la capital escocesa
En el corazón de Edimburgo se produjo un importante enfrentamiento entre defensores de la crítica de género y partidarios de la transexualidad. El centro de esta contienda fue una manifestación organizada por Let Women Speak (LWS), un grupo a menudo anunciado por sus seguidores como faro de la ideología "feminista crítica con el género". La manifestación tuvo lugar frente a la prestigiosa Real Academia Escocesa en una fresca tarde de sábado.
Encabezada por la franca Kellie-Jay Keen-Minshull, también conocida como Posie Parker, la manifestación se organizó principalmente para desafiar los límites de la recién promulgada legislación escocesa sobre delitos de odio. Keen-Minshull expresó sus intenciones, señalando que la manifestación servía como experimento para "poner a prueba la ley", deseosa de observar la respuesta policial a las expresiones críticas con el género en medio de los recientes cambios legislativos, según detalla el Telegraph.
La asamblea se enfrentó a la reacción de varios grupos que defendían los derechos de los transexuales, entre ellos Cabaret Against the Hate Speech (CAHS), que organizó una contramanifestación. A pesar de la posibilidad de conflicto, ambas concentraciones se desarrollaron sin incidentes, y la policía escocesa no informó de ninguna detención.
En su discurso, Keen-Minshull criticó con vehemencia la práctica de la transición entre niños, calificándola de "profundo abuso" y tachando de "absurda" la legislación sobre delitos de odio.
La iniciativa escocesa de lucha contra el odio, encabezada por el primer ministro, Humza Yousaf, pretende consolidar la batalla contra la escalada de odio, garantizando al mismo tiempo la protección de la libertad de expresión. Esta postura se puso de relieve tras el polémico desafío de JK Rowling, que desafió a las fuerzas del orden a detenerla tras criticar en las redes sociales a conocidos activistas trans. La policía, sin embargo, determinó que los comentarios de Rowling no constituían un delito y, por tanto, no tomó ninguna medida.
La contraprotesta estuvo marcada por un vivo despliegue de pancartas, banderas y cánticos en defensa de los derechos de los transexuales. Un portavoz del CAHS expresó su apoyo inquebrantable a la comunidad transexual, haciendo hincapié en la unidad y la resistencia contra el odio. "Nuestra comunidad se manifestó. Nos reímos, cantamos, bailamos, compartimos nuestras historias y un mensaje de alegría y resistencia al odio. Ninguno de nosotros [será] libre hasta que todos seamos libres. LGB con la T, ahora y siempre", declararon, reforzando su compromiso con la inclusión y la solidaridad.